Al contrario de lo que muchos piensan, el transporte aéreo es el medio más seguro del mundo.

Las estadísticas confirman la seguridad de la aviación como medio de transporte. Muchas personas que cruzan el país tranquilamente en nuestras autopistas, se ponen nerviosas cuanto tienen que coger un avión, aunque la mayoría saben bien que volar es mucho más seguro que conducir. Las estadísticas son ciertamente muy claras a la hora de demostrarlo. Con Dan Weintraub publicamos un artículo en 1991 que documentaba el menor riesgo de volar en avión comparado con el conducir en EE.UU. Algunos de los millones de pasajeros que volaron los siguientes años muy probablemente se confortaron por estos datos. Pero ahora, una década mas tarde, las cosas han cambiado.

El secuestro de cuatro grandes aviones de transporte el 11 de septiembre de 2001 y los desastrosos sucesos que sobrevinieron, hizo que muchas personas en los EE.UU. evitaran volar en los siguientes meses. En el cuarto trimestre del año 2001, hubo una caída del 18% en el número de pasajeros comparado con el mismo período del año anterior. Muchos evitan todavía viajar por avión. Por lo tanto, pensamos que era apropiado calcular otra vez los riesgos diferentes entre las actividades de viajar por carretera y viajar por avión, teniendo en cuenta las últimas estadísticas, incluidas las trágicas muertes de los cuatro aviones secuestrados.

SEGURIDAD EN CIFRAS
El riesgo de viajar por avión o por coche vienen determinados por diferentes parámetros. Mientras que el riesgo en la carretera depende fundamentalmente de la distancia recorrida, el riesgo en el avión esta condicionado por el número de despegues y aterrizajes. Un estudio realizado por Boeing indica que de 7.071 víctimas de accidentes aéreos en el período 1991/2000, el 95% ocurrió en las fases de despegue y ascenso o aproximación y aterrizaje. Solo un 5% de las víctimas resultaron de accidentes a altitudes de crucero. Consecuentemente, como hemos señalado previamente, el riesgo de accidente depende principalmente del número de saltos o segmentos del viaje, no de la distancia recorrida.

Al recoger las estadísticas de los vuelos, consideramos las 10 principales o mayores compañías de vuelos domésticos en EE.UU.( Alaska, América West, American, Continental, Delta, Northwest, TWA, United y USAirways). Las compañías de vuelos regionales asociadas no fueron incluidas. Debido a que el número de víctimas en accidentes de aviación varía tanto de un año a otro, usamos los datos del NTSB National Transportation Safety Board durante un período de a 10 años (1992/2001).

Para calcular la probabilidad de que un pasajero determinado muriera en un vuelo non/stop de un solo segmento, dividimos el numero de pasajeros muertos en el período 1992/2001 (433, incluidos los 232 a bordo de los aviones del 11 de Septiembre) por el producto del numero total de segmentos non/stop volados (54.061.237 por la media de pasajeros por segmento non/stop (101.9). El resultado 78.6 por 10 elevado a la menos 9 , es decir aproximadamente 8 por cada 100 millones de vuelos non/stop. La probabilidad de muerte en un vuelo one/stop con dos segmentos se puede calcular combinando las probabilidades de muerte en cada segmento.

En términos generales, dicha probabilidad para los vuelos de dos segmentos es dos veces mayor que para los de un segmento volado (16 por cada 100 millones de vuelos). En la realidad, debido a que para ser víctima del segundo segmento, uno debe haber sobrevivido el primero, el calculo de probabilidad es más complejo. Pero dadas las bajas probabilidades que estamos manejando, la simple aproximación realizada es bastante segura. De forma similar, la probabilidad de muerte en un vuelo two/stop de tres segmentos será aproximadamente tres veces mayor que la de un segmento (24 por cada 100 millones de vuelos), y así sucesivamente.