En las altas cotas atmosféricas la exposición a radiaciones nocivas se incrementa notablemente.

Las tripulaciones de las aeronaves comerciales se exponen a casi el doble de los niveles de radiación que las personas en tierra

WASHINGTON (EXTRACREW.COM/Agencias)- Científicos de la NASA que estudian la radiación de alta altitud publicaron recientemente nuevos resultados sobre los efectos de la radiación cósmica en nuestra atmósfera.

Su investigación ayudará a mejorar la supervisión de la radiación en tiempo real para las tripulaciones de las líneas aéreas, en entornos de radiación potencialmente más altos, como la atmósfera superior.

Lanzado en septiembre de 2015 cerca de Fort Sumner, Nuevo México, el Experimento de Dosimetría de Radiación de la NASA, o RaD-X, usó un globo gigante lleno de helio para enviar instrumentos a la estratosfera para medir la radiación cósmica proveniente del sol y el espacio interestelar.

Los resultados, presentados en un número especial de la revista Space Weather, muestran algunas de las primeras mediciones de su tipo en altitudes de 8.500 a 40.000 metros sobre la Tierra.

Dichos datos demuestran que  el tiempo pasado en la atmósfera superior de la Tierra propician que los tripulantes de las aeronaves se expongan a casi el doble de los niveles de radiación de los individuos en tierra.

La exposición a la radiación cósmica es también una preocupación para la tripulación a bordo de la Estación Espacial Internacional y futuros astronautas que viajen a Marte, que tiene un ambiente de radiación similar a la atmósfera superior de la Tierra. Aprender a proteger a los seres humanos de la exposición a la radiación es un paso clave en la exploración espacial futura.

Los resultados de RaD-X se utilizarán para mejorar los modelos meteorológicos espaciales, como el modelo de radiación ionizante atmosférica para la seguridad de la aviación, o el modelo NAIRAS, que predice los eventos de radiación. Estas predicciones son utilizadas por los pilotos comerciales para saber cuándo y dónde los niveles de radiación son inseguros, permitiendo la redirección de los aviones en la región afectada cuando es necesario.