La parte delantera del carenado desapareció por completo.

Hace pocos meses sucedió un caso parecido con un A380 de Air France

La pérdida de carenados de motor en grandes aviones parece haber entrado en racha. Si en septiembre pasado un A380 de Air France experimentaba un episodio de estas características sobre Groenlandia, ahora ha sido un Triple 7 de United Airlines.

Sucedió el pasado martes cuando el vuelo1175 de United, que cubre la ruta de San Francisco a Honolulu, se encontraba a 45 minutos de tomar tierra en la capital del estado de Hawaii que parte del carenado de uno de los motores del B777, un Pratt&Whitney 4077,  se desprendió, yendo a caer en aguas del Pacífico.

El avión acabó realizando un aterrizaje de emergencia pero sin novedad en el aeropuerto hawaiano, y todos los pasajeros pudieron desembarcar con normalidad.

La FAA ha anunciado una investigación sobre el accidente.