Walsh advierte a sus empleados de la mala situación de la aerolíneaDespués de que la semana pasada anunciase unas pérdidas de 420 millones de euros, el presidente de Bristish Airways, Willie Walsh, ha advertido a sus empleados que la compañía “está en una lucha por su supervivencia” y que “las cosas seguirán empeorando”, ya que todavía “no hemos tocado fondo”.

En sus declaraciones, Walsh afirma que “todo apunta hacia una crisis prolongada” y considera que de sus conversaciones con las centrales sindicales –el 30 de junio vence el plazo que sindicatos y empresa se dieron para negociar las condiciones de la plantilla- debe desprenderse “un cambio permanente” de mentalidad empresarial para garantizar la supervivencia de British a largo plazo.

Sin embargo, las posiciones entre la dirección de la compañía y los empleados están lejanas, sobre todo en el colectivo de pilotos y de tripulantes de cabina de pasajeros (TCP), que no quieren renunciar a ciertos beneficios laborales por temor a que no sean restablecidos por la compañía tras la crisis.

“Nuestra supervivencia depende de que logremos reducir costes permanentemente y de que lo hagamos con rapidez”, ha señalado Walsh.