La divulgación ayer por parte de la BEA del informe final comienza a generar consecuencias.

La divulgación ayer por parte de la BEA del informe final comienza a generar consecuencias.

Los familiares de las víctimas denuncian que el sistema de control de los pilotos «falló enormemente»

PARIS (EXTRACREW.COM/Agencias)- La Asociación de Afectados del Vuelo GWI 9525 en los Alpes ha pedido en un comunicado, emitido a raíz de la publicación del informe elaborado por la Oficina de Investigación y Análisis de Francia (BEA) acerca de las causas del accidente,  los «cambios legales necesarios» tras ver «acreditado» que el sistema de control de los pilotos «ha fallado enormemente» en este caso.

«Las instituciones públicas y privadas tienen la obligación de velar por la seguridad de todos nosotros y en este caso se evidencia que no ha sido así», sostiene dicha asociación, que nació en julio del año pasado de la mano de 45 familias de víctimas de ese vuelo.

«Apelamos a las instituciones que nos representan a hacer los cambios legislativos necesarios para salvaguardar nuestra seguridad. No se puede primar la privacidad de un individuo en perjuicio de la seguridad global», sentencia la nota, que reclama asimismo que «se tomen las medidas necesarias para que las empresas cumplan con la obligación de tener mecanismos eficientes de control de sus empleados».

El informe final de la investigación, que se ha presentado públicamente este domingo  ha confirmado que el accidente fue provocado y ha pedido reforzar el control médico de los pilotos.

En ese documento, la BEA pide, entre otras cosas, que se exija un seguimiento médico a los pilotos con antecedentes psicológicos o psiquiátricos y que se alcance un «mejor equilibrio» entre el mantenimiento del secreto médico y la seguridad pública.

El informe de la BEA incluye recomendaciones sobre seguridad dirigidas a la OMS, a la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), a la Comisión Europea, a la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), al Ministerio Federal de Transportes e Infraestructuras Digitales (BMVI) y a la Asociación Médica Alemana (BÄK).